domingo, 9 de noviembre de 2008
Es estúpido preguntar, porque es absurdo decir que está mal.. es de idiotas decir que no caeré más
Antes creía que difícil era ver una luz en mitad de la oscuridad, pero lo realmente complicado es ver quiénes creen en ella. Por momentos sentía que mis lágrimas eran de sangre, que mis ojos no veían más allá de la realidad asesina que me impedía esperar; de esa pared silenciosa que solo siente pura tristeza, dolor y melancolía, no conocedora del significado de "EUFORIA"(Aunqe sea utópica)-
¿Cómo odiar y amar al mismo tiempo? Esta es otra prueba de que no puedo controlarme totalmente. Los sentimientos y mi mente logran dominarme: Esto hace que lo absurdo se confunda con la genialidad.
No estoy segura de quién diablos soy, cómo soy, cómo actúo, pero lo intentaré...contaré mi historia la cual creo que es la eterna lucha entre el olvido y los recuerdos.
"Soy como una muñeca de porcelana que se choca contra el asfalto"
Mis ojos no son el reflejo de mis miradas con su súbita humedad acompañadas con un ligero temblor de garganta que pocas veces puedo controlar. Mis manos no sienten lo que tocan. Mis palabras no son dichas. Mi compañía está junto a las calles vacías. Mi persona impide verme en el reflejo de la vida, solo lo hace en el vacío de los problemas.
Mala escritora, farsante, contradictoria, incapaz de distinguir, asquerosamente odiada, incomprensible, inútil, obsesiva, traidora, incoherente, abrazada con mis propios brazos, derramando sangre azul, caminando, corriendo, arrastrándome, todo depende de cómo esté el viento, desconocida, víctima del amor (Aún no sé si es un defecto o una virtud), perfectamente imperfecta, manipuladora, perdida en el vacío de mis lágrimas, buscada por la desesperación de respirar, encontrada por el dolor, prisionera del día nocturno, adicta al sufrimiento, elegida por las sonrisas para actuar, autista de mis más hermosos sueños e ilusiones, vagando en el infierno en el que me toca arder, amando hasta enloquecer--
¡Juro que aún así soy sincera!
Todo esto seguirá junto a mí, hasta que mi presente se acabe... o tal vez, cuando encuentre el "Motivo" por el cual cambiar estas palabras.
Sinceramente no me asusta morir... me aterroriza seguir despierta
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